Aún me sigo preguntando de dónde sale todo.

domingo, 29 de enero de 2017

El amor con alas.

In my veins - Andrew Belle

Llevo toda mi vida escribiendo sobre el amor. Sobre el primer amor, el amor apasionado, el amor incondicional, irracional, el no correspondido, el amor roto, nostálgico, y el que se aferra a las cenizas de un incendio. Pero nunca se me ha ocurrido escribir sobre el amor libre. Un amor que, como los versos del mismo nombre, no necesita un acompañante que suene a música con él; un amor que vuela y con ello se alza, y no es necesario que haga nada más. Ni ser alocado, ni perfecto; ni ser el más sensato y ni siquiera ser platónico.
El amor del que hablo es aquél del que no hace falta hablar, del que no existen acepciones del todo certeras. Si dijese que es un amor camaleónico fallaría, pues no cambia de tonalidad para camuflarse con el fondo. Ya sea éste del color de la profundidad más oscura en lo más hondo de la mente o ya sea del tono del brillo de los ojos cuando chispean; nuestro amor es siempre transparente. 
El amor del que hablo es generoso, pues te acompaña en el viaje si sabe cuánto disfrutas dejándote llevar por el viento. No es incondicional: desea tener tu permiso para cuidarte, mirar por ti y quererte cada día. El amor libre te arropa con su piel; te cede su calor, y eso le calienta el alma. El amor libre te admira primero, te mira, y te tira a la cama después. 
Al amor libre debes abrazarlo, olfatearlo, lamerlo, besarlo. Bailarlo. Le irás pintando de colores las plumas y lo querrás cada día más, te sorprenderás de lo lejos que descubrirás que se encuentra el límite.
El amor libre tendrá doble filo; el de querer profundamente y el de ser profundamente querido. Te abrirá las expectativas en tres y multiplicará tus sensaciones. Te será sincero, acogerá tus fallos y tu humildad para reconocerlos. Encontrará únicas y tuyas tus formas de ridiculizarte, hasta llevarte de la mano en ellas. 

Llevo toda mi vida escribiendo sobre el amor. Sobre el primer amor, el amor apasionado, el amor incondicional, irracional, el no correspondido, el amor roto, nostálgico, y el que se aferra a las cenizas de un incendio. Pero nunca se me ha ocurrido escribir sobre el amor libre. Al amor libre lo elegirás sin saberlo, y seguirás eligiéndolo a cada paso. Se abrirá, te rodeará y se cerrará dentro de ti. En el amor libre, os encontraréis sin buscaros. Y os guiaréis a hacer locuras, locuras mayores que amaros siendo pájaros.

El amor del que hablo es el amor más puro que nunca he sentido. El amor que ama el ser. El amor, el amor con el que nos amamos nosotros.